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Mostrando las entradas de mayo, 2019

EL GALLO DE LA CATEDRAL

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Cuando Quito era una ciudad llena de misterios y cuentos, existía un hombre de fuerte carácter, adinerado, muy bohemio y dedicado a la buena vida le tentaban las apuestas, las peleas de gallos, la buena comida, y sobre todo le encantaba la bebida ( mistela) y la graciosa ‘chola’ Mariana, que le robaba más de un suspiro. Este hombre era conocido como don Ramón Ayala y apodado el “buen gallo de barrio”. Asimismo, el personaje se vanagloriaba de sus 40 años de soltería, de su hacienda y de su apellido. Don Ramón desarrollaba su vida con un horario estricto; se levantaba a las 06:00 para luego ponerse el poncho de bayeta y comenzar a desayunar lomo asado, papas, un par de huevos fritos, una taza de chocolate, pan de huevo y el tentador queso de Cayambe. Después de comer como un dios, don Ramón pasaba a la biblioteca y disfrutaba de los recuerdos de sus antepasados. Tras gozar de una hora de siesta, se daba un masaje con agua olorosa y a las 15:00 salía a la calle derro

¡HASTA CUANDO PADRE ALMEIDA!

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Hay una característica muy especial por lo cual se conoce a Quito y es la que la califica de “Quito, ciudad de leyendas”. A propósito de leyendas, muchas personas se preguntan si en verdad existió el cura parrandero de la famosa historia, cuya línea principal dice:  ¿Hasta cuándo Padre Almeida?  con la que el Cristo que le servía de escalera para salir a sus juergas nocturnas le reprochaba. La respuesta es que, efectivamente el dicho fraile si existió; y su fama de bohemio fue muy cierta, aunque no fue el único cura de aquella época que abandonaba su encierro y salía a dar serenatas bajo los balcones de las hermosas muchachas quiteñas. El nombre de este personaje fue Manuel de Almeida Capilla, hijo de don Tomás de Almeida y doña Sebastiana Capilla. A los 17 años de edad ingresó a la Orden de los Franciscanos y sus devaneos temporales tuvieron un punto final, cuando el Cristo de la Sacristía del Convento de San Diego, sobre el que se encaramaba para alcanzar la ventana por la cual

PARQUE NACIONAL LLANGANATES, ENTRE LEYENDAS Y PAISAJES

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El Parque Nacional Llanganates es un sitio lleno de misticismo, paisajes sublimes y rico en biodiversidad. La Leyenda de los Llanganates (ubicado en Ecuador) incluye el misterio del gran tesoro que sigue siendo la mayor atracción para los aventureros, los curiosos y los ambiciosos que buscan piedras y metales preciosos.  En 1533, Rumiñahui se desplazaba desde el actual Ecuador hacia Cajamarca para pagar el rescate del líder inca. Al enterarse de su muerte decidió esconder en un lugar seguro una gran cantidad de oro para proteger el patrimonio inca de los saqueos que realizaron los españoles durante La Conquista. En el intento de descubrir tal invaluable tesoro, varios aventureros se han sumergido en la flora, rocas y ríos de los Llanganates (que se extiende por las provincias de Cotopaxi, Tungurahua, Pastaza y Napo) siguiendo el camino a las riquezas, muchos  desaparecieron, fueron hallados muertos o regresaron con las manos vacías. Para ir a los Llanganates puedes acce

LA LEYENDA DE CANTUÑA

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Cuenta la leyenda que, para terminar el atrio de la iglesia de San Francisco, en el Centro Histórico de Quito, el indio Francisco Cantuña hizo un pacto con el diablo entregándole su alma a cambio de ayuda. Ahora cuatro siglos y medio después, muchos hombres, mujeres y niños repasan esta historia para conocer más sobre nuestras tradiciones y el legado cultural de la época colonial. En la época colonial un indio llamado Francisco Cantuña, impulsado por las ansias de oro y grandeza, fue contratado por los Frailes Franciscanos para la construcción del Atrio del Convento Máximo de San Francisco de Quito. El indígena comenzó la construcción del atrio pero lamentablemente el tiempo que disponía era muy corto. Pasaron los días y la construcción aún faltaba de terminar, por lo que Cantuña poco a poco empezó a desesperarse. Llegó el momento en que faltaba tan sólo un día para la entrega de la obra, y el atrio aún no estaba culminado. Al verse impotente ante l

LOS HERMANOS AYAR

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Sobre la montaña Pacaritambo (doce leguas al noroeste de Cuzco) aparecieron los hermanos Ayar, después del gran diluvio que había desbastado todo. De la montaña llamada "Tampu Tocco" partieron cuatro hombres y cuatro mujeres jóvenes, hermanas y esposas de ellos a la vez. Eran Ayar Manco y su mujer Mama Ocllo; Ayar Cachi y Mama Cora; Ayar Uchu y Mama Rahua y finalmente, Ayar Auca y su esposa Mama Huaco. Viendo el estado de las tierras y la pobreza de la gente, los cuatro hombres decidieron buscar un lugar más fértil y próspero para instalarse. Llevaron con ellos a los miembros de diez Ayllus (organización inca que agrupaba diez familias) y se dirigieron hacia el sudeste. Pero un primer altercado se produjo entre Ayar Cachi, un hombre fuerte y valiente, y los demás. Sus hermanos lo celaban y quisieron matarlo. Con ese plan, le ordenaron volver a las cavernas de Pacarina (se llama así, en quechua, al lugar de los orígenes) a buscar semillas y agua. Ayar Cachi

EL TRIÁNGULO DE LAS BERMUDAS: MITOS Y VERDADES

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¿Cuándo surgió el enigma del triángulo de las Bermudas? ¿Qué pasó exactamente? ¿Cuál es la explicación racional?  El Triángulo de las Bermudas  es una sección mítica del Océano Atlántico delimitada aproximadamente por Miami, Bermudas y Puerto Rico, donde docenas de barcos y aviones han desaparecido a lo largo del tiempo. Circunstancias inexplicables rodean algunos de estos accidentes , incluido uno en el que los pilotos de un escuadrón de bombarderos de la Marina de Estados Unidos se desorientaban mientras volaban sobre el área; los aviones nunca fueron encontrados. Al parecer, otros barcos y aviones desaparecieron de la zona cuando hacía buen tiempo sin siquiera enviar mensajes de socorro por radio. A pesar de que se han propuesto innumerables teorías fantasiosas/paranormales sobre el Triángulo de las Bermudas, ninguna de ellas prueba que estas desapariciones ocurran con mayor frecuencia en este sector que en otras zonas del océano. De hecho, muchas personas navegan por e